Síntesis Histórica
Inicios de la Ucebol
La Asamblea de las Iglesias Presbiterianas realizada en Corea del Sur el 25 de mayo de 1982, nombró a la familia del Dr. Eun Shil Chung como MISIONEROS en Bolivia, produciéndose su arribo al país el 13 de junio de 1982. Desde un principio uno de los objetivos centrales de los misioneros fue integrar los procesos de evangelización con el servicio y la educación, articulando los niveles iniciales con la educación superior. En ese entendido se realizan las gestiones ante las autoridades de gobierno para obtener la autorización legal respectiva para poner en funcionamiento las primeras carreras a nivel técnico superior y licenciatura.
Posteriormente en fecha 10 de mayo de 1991, se emite la Resolución Ministerial No. 565 que autoriza en forma definitiva el funcionamiento de la Universidad Cristiana de Bolivia. Fue creada con el propósito de satisfacer la emergente demanda de formación profesional de nuestros recursos humanos en ciencias de la salud. De hecho fue la primera institución de educación superior en abrir la carrera de medicina en Santa Cruz de la Sierra, en circunstancias que la mayoría de nuestros jóvenes debían desplazarse a universidades del interior y exterior del país para continuar sus estudios profesionales. En la visión de los principales impulsores de esta obra, existía la necesidad de crear nuevas carreras para completar el área de ciencias de la salud, lográndose en una tercer etapa la apertura de odontología, bioquímica y farmacia, fisioterapia, y posteriormente mecánica dental. Paralelamente se fue gestando la creación de otras carreras de humanística y ciencias sociales.
En casi 20 años se ha transitado por un apasionante proceso de crecimiento académico e institucional conectado con las reales necesidades de nuestra comunidad y el país en materia de educación superior. Esta evolución se ha ido generando desde la planificación, la infraestructura, la concepción de un modelo educativo genuino, la incorporación de nuevos paradigmas dentro del proceso enseñanza-aprendizaje, los servicios estudiantiles, la gestión de los recursos humanos que administran el saber, las aulas, los laboratorios, los escenarios de estudio, la currícula, etc.,etc.
Precisamente nuestro tránsito por el cambio, la comprensión y asimilación de los nuevos conceptos de la educación superior, también se van reflejando en la construcción de espacios y ambientes donde se deben desarrollar el intercambio de conocimientos, la búsqueda de información, actualización y orientación que acompañen el proceso de formación integral de los estudiantes en sintonía con las responsabilidades del encargo social y su aporte a los procesos de transformación de nuestra realidad.